COMENTARIO DE LA MAÑANA
Mi hijo Federico salió esta mañana para dar un examen y poder terminar su tercer ciclo de EGB para ingresar en el Polimodal. Me embarga ahora una razonable preocupación: Ingresa al Polimodal o al Secundario? Cursará 1er año o 3ro?
En la Escuela no hay información ni existe ningún aviso respecto de cuál será el plan de estudios. Todo parece seguir igual, después de un año con tanta propaganda en torno al cambio y a la reforma de la reforma, pero a pocos días del inicio de clase nada se sabe.
Peor aún: tampoco sabemos ciertamente si los alumnos bonaerenses podrán iniciar su ciclo lectivo. La soberbia del gobernador sigue sin dar respuesta ni solución al reclamo de los docentes que perciben sueldos miserables que se contraponen al discurso oficial. Tanto se ha hablado del presupuesto educativo, de la ley de financiamiento, pero seguimos teniendo maestros cuyas familias engrosan las estadísticas de los hogares que no alcanzan a cubrir sus necesidades mínimas. Y qué decir de la falta de infraestructura y materiales en las escuelas del conurbano, especialmente en su segundo cordón. Cuánto es la capacidad de aceptar ese discurso oficial en distritos como Florencio Varela, Moreno o José C. Paz? Cuántas modificaciones han significado para ellos las leyes aprobadas durante el último año?
¿Hasta cuándo seguiremos tolerando la destrucción de la educación pública en la provincia que viene condenando a generaciones de chicos a no encontrar su lugar, a no recibir los conocimientos mínimos para ingresar a la universidad o al mercado de trabajo?
Si yo me siento esta mañana atropellada o ignorada por las autoridades educativas provinciales, no quiero imaginar cómo habrán de sentirse los alumnos y los docentes, víctimas de politicas erráticas e hipócritas que los siguen utilizando como conejillos de indias, improvisación y desinterés por la calidad de la enseñanza.
El avance de la globalización capitalista es perjudicial para los países de América Latina porque solo consolida nuestra dependencia hacia los centros de poder económico. Y porque no se aprovechan las ventajas inclusivas de la era del conocimiento y la tecnología para poder quebrar el circuito vicioso de la pobreza transferida de padres a hijos que no tienen la posibilidad de acceder a una educación de calidad. Solo el acceso a la enseñanza integral en condiciones de igualdad podrá romper ese circuito. Brindar esa herramienta depende de nosotros: de los que gobiernan y de los que eligen.
me resulta interesante que se analise la realidad polutuca desde las vivencias personales.